sábado, junio 07, 2008

Estados de Ánimo.

I
Me lo dijeron mil veces,
pero nunca quise poner atención.
Cuando vinieron los llantos
ya estabas muy dentro de mi corazón.
Te esperaba hasta muy tarde,
ningún reproche te hacía;
lo más que te preguntaba era que si me querías.
Y bajo tus besos en la madrugada,
sin que tú notaras la cruz de mi angustia,
solía cantar:
Te quiero más que a mis ojos,
te quiero más que a mi vida,
más que al aire que respiro
y más que a la madre mía.
Que se me paren los pulsos
si te dejo de querer,
que las campanas me doblen
si te falto alguna vez.
Eres mi vida y mi muerte,
te lo juro, compañero,
no debía de quererte... no debía de quererte
y sin embargo te quiero.

II
Este adiós no maquilla un hasta luego,
este nunca no esconde un ojalá,
estas cenizas no juegan con fuego,
este ciego no mira para atrás.
Este notario firma lo que escribo,
esta letra no la protestaré
ahorrate el acuso de recibo
estas vísperas son las de después.
A este ruido tan huérfano de padre
no voy a permitirle que taladre
un corazón podrido de latir.
Este pez ya no muere por tu boca,
este loco se va con otra loca,
estos ojos no lloran más por tí.

III
Luego de vuelta a casa, enciendo un cigarrillo,
ordeno mis papeles, resuelvo un crucigrama,
me enfado con las sombras que pueblan los pasillos
y me abrazo a la ausencia que dejas en mi cama.
Trepo por tu recuerdo como una enredadera
que no encuentra ventana donde agarrarse. Soy
esa absurda epidemia que sufren las aceras,
si quieres encontrarme ya sabes dónde estoy...

(vivo en el número 7, calle melancolía)



Sabina es mi pastor...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

u.u !!

Anónimo dijo...

ola pima u.u uxis
k etamos cagao
cual de las dos
mas caga weon
te kiero muxo
pima regalona
uuuu.uuuu
bexo bexo
uuu genial
las cosas k tienes aki sisissisiisis

:D